Dia gris

Las nubes se aferran a los montes

Y descienden hasta el valle, ahora brumoso.

Se pierden de vista los horizontes

Que marcaban el camino a lo remoto.

No suena del pájaro alegre el trino,

Ni el gallo ha cantado esta mañana;

El paisaje gris, oscurecido,

Va pasando lentamente a través de mi ventana.

El día va cayendo, como triste,

Sin luz alguna que contemplar;

Llegará la noche pensando que el tiempo no existe

Y no saldrán las estrellas ni la luna brillará.

A lo lejos se abre un claro, a lo lejos…

Pero el sol no ha aparecido.

Debe estar, donde las nubes se aferran a los montes

Y descienden hasta el valle, ahora brumoso.

Perdiendo de vista el horizonte

Que abrió su paso, hoy, hacia el olvido.


2 comentarios:

Minerva dijo...

HOLA!

Un relato gris, pero muy bello, hasta cuando el sol no sale ni la luna brilla, pueden salir bonitas palabras.

SALUDOS!!

Anónimo dijo...

Leyéndote pensaría que estás mirando a través del cristal de mi ventana y no a 800 kms, en tierras donde el sol tiene sus dominios, porque has descrito la luz y el paisaje del norte como pocas veces he visto en breves palabras.

Es aquí donde esas mismas nubes tienen su reino en las cumbres, donde los valles aparecen preñados de nieblas, donde la lluvia lo empapa todo mientras el día declina con tonos cenicientos en medio del silencio, sólo roto por el sonido del agua en los charcos o el gemido del viento entre los árboles.

Es... parte de nuestra alma y forma de ser.

Besos tesoro.