A veces el silencio es el refugio
aunque otras, es castigo.
Hoy no quiero mis palabras por testigo,
tan solo una hoja de papel en sucio.
Hablar por hablar, y seguir hablando,
para que nadie se de cuenta
que por mi alma resbala lenta,
una lágrima que por dentro fue brotando.
Casi me olvido de todo así,
sin escuchar a mi pensamiento.
Casi, porque no se va el sentimiento
que me hace volar hacia tí.
No es facil siquiera escribir lo que digo,
hay momentos que no tengo el valor.
No es facil intentar apartar el amor
que siento por ti, para ti y contigo.
Nadie dijo que fuera facil, es cierto,
por eso es mejor seguir callada...
Decir que te amo no sirve de nada
y si te digo lo contrario, miento.